Puno: Sembrar la papa junto al pan es para cosechar papas del tamaño del pan

La siembra de papa en la IEP 72601 de Caluyo ayuda al aprendizaje en el área de comunicación.

La institución educativa primaria IEP N.º 72601 se ubica en comunidad campesina de Caluyo, distrito de Orurillo, provincia de Melgar, región Puno. Orurillo es una cuenca muy especial con un microclima, por efectos del lago del mismo nombre, propicio para la crianza de la agrobiodiversidad desde tiempos remotos; por estas características es considerado como la despensa de la provincia de Melgar. En algunas comunidades del distrito aún se mantienen las autoridades tradicionales que velan por la agrobiodiversidad durante la campaña agrícola.

En la IEP estudian 32 niños y niñas, hoy bajo la modalidad APRENDO EN CASA, sopesando todas las vicisitudes de la situación. Con el entusiasmo de la profesora Irma Pinto, directora de la IE, y la decisión y respaldo de los padres de familia se han colectado alrededor de 400 Kg. de diversidad de semilla de papa nativa, destacando entre ellas las variedades qompis, peruanita, huayro y otros. Como parte de las atenciones a la emergencia productiva esas semillas se sembrarán en las parcelas de los papás de cada uno de los estudiantes; han decidido los papás que cada niño o niña tendrá su propia parcela de cultivo, allí los papás van ha transmitir los saberes y secretos de crianza a sus hijos.

Durante el acto de entrega de semilla, el 21 de octubre, el yachaq (sabio) Don Pedro Andrés Calsina Lope recordó que antaño, “la primera siembra iniciaba con un ritual, el primer tubérculo se colocaba en la tierra siempre estaba acompañado con un pan y coca, allí permanecía todo el día, concluida la siembra en la tarde, se retiraba el pan y la papa para ser llevada a la casa, allí permanecía en un sitio especial hasta la cosecha; se hacía esto para cosechar las papas así como del tamaño del pan”.

Niños participando en el ritual.

El yachaq, Don Pedro, inicia la ceremonia de entrega de semillas con un ritual de permiso y agradecimiento la Pachamama, invocando a las deidades criadoras a fin de que protejan a las nuevas semillas que viene en condición de nueras. Para la ocasión los estudiantes lucieron emocionados la ropa típica de Orurillo. Los papás señalan que el acto ritual no lo hacían en la escuela, ahora -señalan ellos y ellas- es necesario que los niños y niñas aprendan respetar la semilla y la tierra con el ritual.

En Orurillo la siembra grande está por empezar, generalmente antes y pasando las celebraciones de todos los santos; sin embargo, la poca humedad en el suelo, el cambio de la fase de luna, hace que la siembra se retrase algunos días. De todos modos, los tiempos han cambiado, ya no es como antes, y tienen que estar muy pendientes para encontrar un momento propicio.

Los padres de familia expresan el compromiso de acompañar a sus hijo e hijas en la chacrita que van a criar. Asimismo, lo niños, como parte de su trabajo de aprendizaje, indagarán con sus papás, abuelos y vecinos los saberes de crianza, las señas y señaleros en la crianza de la papa.

La profesora Irma subraya que la actividad de crianza de la papa compromete el trabajo en área de comunicación; así entre los 1º y 2º grados afianzará el aprendizaje de la escritura, y entre los 5º y 6º grados la escritura y producción de textos; también en el poco tiempo que queda se recrearán algunas canciones alusivas a la crianza de la chacra en el área de arte.

Estas acciones se dan en marco del proyecto de aprendizaje: “Reintegrándonos al sembrío de la papa”, ejecutado en la IE con el apoyo del PRA en la línea de educación intercultural y en el marco de la emergencia productiva como actividad sanadora frente a la actual pandemia.